SANTO DOMINGO (Rep. Dominicana).-Los munícipes de Jimaní volvieron a marchar ayer para demandar al gobierno de Danilo Medina una rebaja “en la alta facturación” de la energía eléctrica así como el suministro de agua potable.
Los manifestantes recorrieron las calles, como en ocasiones anteriores, reclamando a la Empresa Distribuidora de Electricidad del Sur (Edesur) el cese de lo que consideran una “campaña desleal e injustificada” por la alta facturación de la energía eléctrica.
En la provincia Independencia es una contradicción que una de las necesidades básicas insatisfechas sea la disponibilidad de electricidad, sobre todo en un provincia donde sobra la energía ya que posee una hidroeléctrica”, se quejaron.
También demandan del Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (Inapa) la solución de la carencia del agua potable, la que consideran un “suministro básico” para el ser humano.
Los munícipes llamaron al Gobierno a dialogar sobre estas necesidades, ya que aseguran estar “cansados de las falsas promesas verbales de algunos legisladores y tomadores de decisiones”.
Denunciaron además, que el municipio mueve US$576 millones al año en su comercio formal con Haití por el puesto fronterizo de Malpaso.
Los munícipes amenazan con realizar paradas cívicas que visibilicen la situación de abandono que desde hace décadas padecen y que los han situado en el cuarto lugar del ranking de pobreza en el país.
También ponderan llevar sus reclamos hasta la Oficina de Protección al Consumidor de Electricidad (Protecom) y el Instituto Nacional de Protección de los Derechos del Consumidor (ProConsumidor).