Los Tigres del Licey y Leones del Escogido salen al terreno para celebrar una nueva batalla, la cual se espera tendrá característica de épica.
Dos franquicias que en las pasadas 23 series finales apenas se han observado los rostros en dos ocasiones, desde hoy esperan brindarle a sus respectivas fanaticada lo mejor de su talento.
Aunque los Leones poseen un trío de gallardetes en los últimos cuatro torneos y dominaron a los bengaleses 11-5 en sus enfrentamientos en la regular y el round robin, la historia en series finales es negativa, cayendo en cinco ocasiones de las siete veces que se han enfrentado.
La última de esta se produjo hace tanto tiempo como 15 años en una histórica jornada donde los bengaleses se alzaron con la corona 5-4 en un noveno partido no apto para cardíacos.
En ese último encuentro, el Escogido llegó al octavo episodio ganando 7-6, tras pisar el pentágono en tres ocasiones, empero en el noveno los bates azules se rebelaron frente al estelar relevista Anthony Chávez y con cuatro carreras le dieron vuelta al marcador para finalmente triunfar 10-7. Ronnie Belliard y Manny Martínez remolcaron carreras en esa entrada frente a Chávez en lo que fue una de los peores fracasos en los anales de los Leones.
Las finales entre ambos conjuntos habian iniciado en 1951 en la celebración del primer torneo invernal. La misma fue conquistada por los Tigres 4-1 bajo las orientaciones de Manuel Henríquez, el tercer manager usado por el Licey en esa campaña.
Licey primera corona bajo luces
Cinco años más tarde, en 1956-57 El Escogido se desquitó y venció a los azules 5-2 bajo la dirección de Red Davis, siendo esta la segunda corona seguida de los escarlatas, de tres que consiguieron de manera consecutiva.
Luego, que los escarlatas conquistaran tres cetros seguidos se miden nuevamente al Licey en 1958-59 cuando un cuarto gallardete, sin embargo los bengaleses con Joe Schultz al frente vencen a sus rivales 5-4 en una serie recordada por el famoso incidente de la galleta que le propinó José Arismendy Trujillo (Petán) al torpedero André Rodgers en el sexto partido. Este éxito le brindó al Licey su primer campeonato en la época bajo luces al derrotarlo 3-2. Peter Burnside se anotó la victoria, su tercera de la serie.
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MOTA GANA PREMIO MANAGER-JUGADOR
Lá década del 70 inicia con otra final entre estos dos habitantes del estadio Quisqueya y los azules vuelven a salir por la puerta grande con Manuel Mota haciendo las veces de dirigente- jugador, ganando los felinos 6-1, siendo el único equipo que ha requerido ganar seis choques para lograr la corona. La misma estaba pactada a un 11-5.
Mota había bateado .323 en la serie regular.
Pasaron 18 torneos para que ambos conjuntos se vieran las caras en una final y en 1988-89, los escarlatas con Phil Reagan como capataz superaron 4-0 al Licey, contando con la ofensiva de Gerónimo Berroa, Sammy Sosa, Junior Noboa, Luis De los Santos y neutralizando a unos Tigres que contaban con una envidiable rotación monticular.
tomada del listindiario.com
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