POR ISMAEL BATISTA
La fundación del Partido de la Liberación Dominicana fue plasmada en el primer congreso constitutivo Juan Pablo Duarte en el año 1973. Quedando el primer Comité Central conformados por 30 miembros. En la regencia de su presidente fundador Juan Bosch, la organización política realizaba congresos ordinarios cada cuatro años de manera consecutivas, secuencia que fue interrumpida con la realización del VI congreso “profesor Juan Bosch en 2001”, es decir, siete anos después del congreso ordinario de 1994. Se continuaron Infringiendo los estatutos del partido con la celebración, en 13 anos, de dos congresos ordinarios, incluyendo el actual denominado “comandante Norge Botello”, el cual entra es su fase de conclusión.
La inobservancia de la secuencia metodología de los congresos ordinarios peledeístas cada cuatro años fueron cruciales para los cambios dialécticos inherente al Partido de la Liberación Dominicana, en una sociedad y un mundo de cambios acelerados donde la correlación de las fuerzas política sociales y, las implicaciones de las variables económica demandan constantemente la elaboración de nuevas tácticas y estrategias políticas conforme lo demandan las circunstancias nacionales e internacionales.
Una breve reseña del rol de los altos organismo de dirección política del partido en la dinámica del PLD, permite valorar objetivamente las consecuencias políticamente funesta de la conducta en práctica: entre congreso y congreso el Congreso Nacional es el máximo organismo de dirección del Partido de la Liberación Dominicana, el cual está constituido por todas las instancia de dirección partidaria, desde los presidentes de los comités de base hasta los miembros del Comité Central. Comenzando con los postulados del Congreso Nacional del partido, mencionaremos: la de aprobar la plataforma del programa de gobierno del partido, la elaboración de los estatutos, aprobar, modificar o fijar los lineamientos generales que orientan la participación política de la organización en el plano nacional e internacional.
Prosiguiendo con el orden jerárquico de dirección partidaria, el segundo lugar le corresponde al Comité Central seguido por el Comité Político. Este, previa sanción del Comité Central pondrá en ejecución el día a día de las políticas acordadas por el congreso del partido, llevara a cabo las relaciones del partido con otras organizaciones políticas, con el Estado y las relaciones partidarias internacionales, así como también, las políticas del partido en ambas cámaras congresuales, designar y dirigir la desaparecida comisión Político- Técnica de los ayuntamientos.
Para entender el proceso de involución del Partido de la Liberación Dominicana, es necesario remontarse al 19 de junio del 1994 cuando Juan Bosch renuncia del partido, alegando la existencia en el PLD de una corriente oportunista interesada solamente en escalar cargos públicos y obtener dinero.
Juan Bosch fallece el 1 de noviembre del 2001, para ese mismo año, la corriente oportunista a que hace referencia Bosch en el 1994, entra en aprestos para la celebración del VI congreso del partido que lleva el nombre del fundador. En el congreso”profesor Juan Bosch” se aprobaron reformas orgánicas y estatutarias que derivaron en la conversión del PLD de un partido de cuadro a un partido de masa. Es el tipo de organización que conlleva a la inoperancia de los organismos. En el devenir del proceso, se esfuman los principios, los planes estratégicos para una República Dominicana mejor, la ética política y la vocación de servicio cultivada a lo largo de una escuela política de años.
La evolución del proceso en la aniquilación del partido de cuadro arrastra el Comité Central aumentar su matrícula a cifras que lo convirtieron ex profeso en un organismo inoperante, en efecto, en tales circunstancia el Comité Político asume la prerrogativas del Comité Central. El comité Político ejecuta políticas que aparentan se previamente concebidas: implementa ampliamente el modelo económico neoliberal en el país: se capitalizan o privatizan las empresas estatales, se firman desiguales tratados de libre comercio; incremento de la deuda externa con la consecuente pérdida de la soberanía económica de la nación, pasando la economía a manos del Fondo Monetario Internacional. Las consecuencias económicas, sociales y políticas del modelo en ejecución son ampliamente conocidas.
Finalizado el congreso Norge Botello, la matricula del Comité Central será de unos de 625 integrantes, lo que lógicamente es un gran ingrediente para continuar la inoperancia, por lo tanto, el nuevo Comité Central tendrá que ingeniársela para adquirir nuevamente el rol perdido en el proceso involutivo del Partido de la Liberación Dominicana. Es posible, el político que no es utópico jamás alcanzara lo que se propone, de lo contrario la obra política inconclusa de Juan Pablo Duarte que el PLD en su congreso constitutivo asume completar será obra de futuras generaciones.
El autor: Es miembro del CC del PLD
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