Varias personas del pueblo se molestaron al ver que los dos primeros ganadores del proceso fueron dos un ingeniero y una constructora que no son de la provincia.
El primer ingeniero seleccionado fue Pablo Fernández Alfaro, para construir el Liceo de Juancho, mientras que el segundo ganador fue la constructora SHARP.
El representante de la constructora dijo a este medio que desiste de construir la obra.
"Lo puedes decir, yo desisto de eso, no me interesa", dijo Wilfir Sharp, visiblemente nervioso y con un poco de lagrimas
El gobernador de Pedernales llamó a los militares a conservar la vida de los ingenieros que no pertenecen a esta provincia, ya que los presentes querían agredirlo.
El senador Dionis Sánchez dijo, antes del sorteo, que no estaba de acuerdo en que en el sorteo participaran personas que no son de la provincia.
El diputado por el Partido de la Liberación Dominicana José Díaz pidió al Gobierno que haga una excepción por Pedernales, ya que el pueblo se está cayendo a pedazos y que las constructoras multimillonarias que les den una oportunidad a los ingenieros de la provincia.
Tras el incidente, el abogado notario Casimiro Mosquea dijo que de manera automática el proceso se suspendía. Profesores, amas de casas y obreros pidieron a los ingenieros no volver a la provincia porque lo iban a sacar de otra manera.
Dos obras quedaron por sortearse.
Minutos antes de iniciar el sorteo, el cura Antonio Fernández se marchó de la actividad molesto porque el abogado Rubén Matos Suárez estaba solicitando que sacaran de la tómbola a ingenieros que no son de la provincia.
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