PEDERNALES.- Brunilda Antonia Alemán (Ana Silvia), señora con 76 años de edad , que se graduó de bachiller hace tres, asegura que la edad y la tardanza no constituyen obstáculos para las personas, en especial, jóvenes para estudiar y alcanzar el éxito deseado.Con entusiasmo, esta dama que hace tres años terminó el bachillerato, lamenta que en las universidades no la acepten para estudiar la carrera que siempre ha deseado, que es el magisterio, debido a su avanzada edad. que está a la espera de que el presidente Danilo Medina le conceda una pensión.
Pero a pesar de su edad Ana Silvia tiene el espíritu de una persona joven, porque nunca se amilana ante las adversidades de la vida, cosa que la llena de orgullo como ser humano que es.
Relata Ana Silvia que fue fundadora de la Escuela Casandra Damirón en el sector El Valiente de Santo Domingo, y que siempre ha tenido bien conservado el certificado del octavo grado, el cual muestra con respeto y orgullo a sus amistades.
Explica que tras obtener el título de bachiller hizo un curso de Informática en un instituto cuyas siglas son Itla, el cual culminó exitosamente, así como otro sobre Química.
"Recuerdo que fuí beneficiada con una beca para estudiar en una universidad, en la cual me rechazaron por mi edad, pero no crean que me detuve en mi interés de alcanzar el éxito, siempre seguí hacia adelante", dijo la mujer.
Expresó que sirvió como profesora voluntaria de escuela durante muchos años sin estar nombrada, cosa que nunca le importó, debido a que su propósito era ayudar a los niños a que se iniciarán exitosamente en el área educativa dominicana.
Indicó que desde octavo curso se dedicó a dar clases voluntariamente a niños del nivel inicial por varios años, y que inclusó, llegó a ser mayordomo de una escuela, de donde fue cancelada sin recompensa alguna, "sin tan siquiera tomar en cuenta mi interés por alcanzar el éxito".
"Recalco que la tardanza ni la edad son óbices para impedir que una persona estudie una carrera. El éxito es duro de alcanzar, pero todo el que se dispone a hacerlo lo logra. Algunos llegan a él velozmente, otros trotando y algunos gateando, pero llegan, y esto es lo importante, llegar a la cima para luego disfrutar desde ella, sin hacer daño a nadie.
Ahora, Ana Silvia, mujer de una buena dicción, conversadora, inteligente, con una mente muy abierta para entender las cosas, servidora y preocupada porque la juventud se prepare para el futuro, implora al Presidente Danilo Medina que le otorgue una pensión digna que le permita vivir tranquilidad los últimos años que le quedan de vida en este mundo.
"Señor Presidente, abrigó la esperanza en lo más profundo de mi corazón de que su digna persona me concederá la pensión que le solicito", puntualizó Ana Silvia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario