Señor Presidente:

Para muchos sureños la construcción de la carretera San Juan-Barahona es una de las mayores y mejores inversiones de su Gobierno en la zona, sólo superada por la Presa de Monte Grande en fase de construcción.

Por distintas vías le hemos expresado nuestro eterno agradecimiento por esta obra que de hecho ya une los valles de Neyba y San Juan.

Hace apenas unos meses que Usted, personalmente, hizo un recorrido en vehículo en el que comprobó que a la vía sólo le faltan algunos detalles para su terminación y entrega. Para su llegada a la zona, los responsables de los trabajos hicieron algunas labores rápidas para facilitar el desplazamiento de Usted y su comitiva. Eso sucedió a finales del 2010 y fue lo último que se hizo.

Ahora la preocupación se apodera de nuestra gente. Los trabajos más que paralizados están abandonados, con sus posibles consecuencias.

Abandono

Después que Usted pasó por allá se ordenó ampliar los puentes, pues representan un peligro enorme. Se llegaron a destruir los muros laterales y ahora el peligro es mayor. Ha comenzado a llover. Como las canaletas a ambos lados de la vía no se terminaron, el agua acumulada en algunos tramos sube al pavimento y comienza a deteriorarse. En otros puntos no se completó el asfaltado. El paso constante de los vehículos, comienza a hacer daños. El panorama se está complicando.


No permita que una obra de esta envergadura quede trunca. No solo por la inversión millonaria que ha conllevado para alcanzar ese nivel, sino para mantener viva la alegría de la gente de esta región. Señor Presidente, estamos a tiempo para que por su decisión se reinicien las labores en la carretera San Juan-Barahona. Sepa Usted que el agradecimiento de los sureño será eterno.

Con atentos saludos,
Lito Santana