(Tomado de Barahonero.com).
Los dominicanos en el exterior, oriundos de las provincias que componen el sur dominicano, enviaron el 5% del monto total de toda la remesa en el 2010, que según las estimaciones más recientes, ascendieron a más o menos US$3,400 millones equivalente a 7% del PIB.
Pese a que la crisis financiera mundial disminuyó los envíos de remesas, principalmente desde España, la diáspora sureña (algunos de ellos en paro), siguen enviando remesa a sus familiares, talvez en menor proporción que años anteriores, siendo el mismo un alivio económico en muchos hogares de esa zona, la más pobre de todo el país.
Hoy, la remesa constituye, junto a la agricultura, la principal fuente económica en la mayoría de las poblaciones del sur. Lamentablemente, como en toda las regiones del país, la remesa no ha sido aprovechada por los habitantes del sur como el principal motor del desarrollo porque la misma ha sido utilizada, en su mayor parte a cubrir los gastos en el hogar (principalmente en consumo de artículos de primera necesidad) o algunas que otras cosas improductivas.
Esta situación se debe a que las personas receptoras de remesas en las provincias del sur no cuentan con instituciones especializadas que les ayuden a canalizar esos recursos al ahorro popular, inversiones productivas o para implementar estrategias financieras que de rendimiento a largo plazo y sean capaces de impulsar el desarrollo económico de sus municipios. Muchos pueblos del sur aún mantienen o han empeorado sus niveles de pobreza a pesar de que miles familias reciben constantemente remesas desde el exterior.
El algunos municipios del sur se puede notar el poco impacto que las remesas han tenido en el desarrollo económico de esos pueblos ya que la misma no ha sido suficiente para la creación de empleo, negocios, ahorros y propiedades".
Las remesas no son bien repartidas en el país
Veamos estos datos: De los US$3,400 millones en remesa recibida en el 2010, se puede verificar que no son repartidas de forma equitativa por cada región del país:
* Cibao: US$1,530 millones (45%)
* Gran Santo Domingo: US$1,360 millones (40%)
* Este: US$340 millones (10%)
* Sur: US$170 millones (5%)
Las remesas dominicanas tampoco son gastadas de forma equitativa entre consumo e inversiones:
* Comida y artículos de primera necesidad: US$2,040 millones (60%)
* Educación: US$578 millones (17%)
* Lujos y otros: US$204 millones (6%)
* Negocios: US$170 millones (5%)
* Ahorros: US$170 millones (5%)
* Propiedades: US$136 millones (4%)
Por el contrario, según las cifras más recientes (2007) el consumo doméstico asciende a más de US$17,700 millones con las remesas equivalente a tan solo el 13% del mismo a nivel nacional y con los siguientes pesos en el consumo interno de cada región:
* Cibao: 17%
* Gran Santo Domingo: 13%
* Este: 13%
* Sur: 10%
Estos números revelan que la remesa es gastado en consumo de poca relevancia para el desarrollo económico del país a largo plazo.
* Fuente de este artículo Economista Dominicano
* Banco Central de la República Dominicana
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