Si en el hospital San Bartolomé no existen condiciones para practicar partos, entonces no deben hacerse”, fue la afirmación irresponsable de la principal autoridad de Salud Pública en Neyba, tras conocerse la muerte de una joven, luego de dar a luz a su niño.
Las declaraciones revelan que Víctor Manuel Terrero Encarnación, director regional del Ministerio de Salud Pública, hasta el momento del deceso de la joven Nafis Sánchez Cuevas, desconocía la incapacidad del centro para realizar cesáreas y partos.
Hubo la necesidad de que se perdiera una vida para que Terrero Encarnación se reuniera con las autoridades del hospital San Bartolomé, en Neyba, se enterara de las condiciones de precariedad del centro y actuara en consecuencia.
Los partos y las cesáreas fueron suspendidos en el centro asistencial, luego que Sánchez Cuevas, de 22 años, nativa de Villa Jaragua, muriera tras alumbrar un niño, criatura que se encuentra en buen estado de salud.
Terrero Encarnación señaló que en lo que se resuelve el problema del centro asistencial, los partos y cesáreas de la zona de Neyba, se realizarán en el hospital Jaime Mota de Barahona.
“Estamos sorprendidos por la forma en que se manejó el caso de la joven Sánchez Cuevas, por lo que hemos estado dándole seguimiento para aclararlo todo”, explicó Terrero Encarnación.
Sánchez Cuevas murió la pasada semana, tras haber tenido un parto en el hospital San Bartolomé, pero por su grave estado de salud, tuvo que ser referida al centro Jaime Mota, donde expiró en el trayecto al centro sanitario.
“Nos reunimos con las autoridades electivas de la provincia, como es el gobernador y la directora del hospital, quienes determinamos prohibir que se hagan partos y cesáreas en el hospital San Bartolomé”, insistió Terrero Encarnación.
El director regional del Ministerio de Salud Pública explicó que la joven Sánchez Cuevas hizo una hemorragia posparto y en condiciones desfavorables fue enviada al hospital Jaime Mota, de Barahona, “la situación era prevenible, pero no fue bien manejada”.
Reiteró que la paciente no fue bien evaluada y mal manejado el caso, “la paciente debió ser intervenida quirúrgicamente en el mismo lugar donde fue atendida, y si no hay las condiciones, entonces no debe hacerse el parto”.
El funcionario anunció para los próximos días la reorganización la atención obstetra y pediátrica en ese centro asistencial. “Nosotros nos hemos propuesto reducir la mortalidad materna en esta zona y en ese tenor nosotros lo haremos”.
Terrero Encarnación indicó que están ideando preparar centros sanitarios de tercer nivel en la zona, donde hay 29 obstetras, 15 pediatras y 12 anestesiólogos, peor no están resolviendo los problemas.
Aseguró que el próximo martes, a las 9:00 de la mañana, el caso de la joven se discutirá en el hospital San Bartolomé. Sánchez Cueva dejó cuatro hijos huérfanos.
El director regional del Ministerio de Salud Pública señaló que tiene en sus manos el expediente de la joven Sánchez Cuevas y que será sometido a estudios y posteriormente se tomarán decisiones
Las declaraciones revelan que Víctor Manuel Terrero Encarnación, director regional del Ministerio de Salud Pública, hasta el momento del deceso de la joven Nafis Sánchez Cuevas, desconocía la incapacidad del centro para realizar cesáreas y partos.
Hubo la necesidad de que se perdiera una vida para que Terrero Encarnación se reuniera con las autoridades del hospital San Bartolomé, en Neyba, se enterara de las condiciones de precariedad del centro y actuara en consecuencia.
Los partos y las cesáreas fueron suspendidos en el centro asistencial, luego que Sánchez Cuevas, de 22 años, nativa de Villa Jaragua, muriera tras alumbrar un niño, criatura que se encuentra en buen estado de salud.
Terrero Encarnación señaló que en lo que se resuelve el problema del centro asistencial, los partos y cesáreas de la zona de Neyba, se realizarán en el hospital Jaime Mota de Barahona.
“Estamos sorprendidos por la forma en que se manejó el caso de la joven Sánchez Cuevas, por lo que hemos estado dándole seguimiento para aclararlo todo”, explicó Terrero Encarnación.
Sánchez Cuevas murió la pasada semana, tras haber tenido un parto en el hospital San Bartolomé, pero por su grave estado de salud, tuvo que ser referida al centro Jaime Mota, donde expiró en el trayecto al centro sanitario.
“Nos reunimos con las autoridades electivas de la provincia, como es el gobernador y la directora del hospital, quienes determinamos prohibir que se hagan partos y cesáreas en el hospital San Bartolomé”, insistió Terrero Encarnación.
El director regional del Ministerio de Salud Pública explicó que la joven Sánchez Cuevas hizo una hemorragia posparto y en condiciones desfavorables fue enviada al hospital Jaime Mota, de Barahona, “la situación era prevenible, pero no fue bien manejada”.
Reiteró que la paciente no fue bien evaluada y mal manejado el caso, “la paciente debió ser intervenida quirúrgicamente en el mismo lugar donde fue atendida, y si no hay las condiciones, entonces no debe hacerse el parto”.
El funcionario anunció para los próximos días la reorganización la atención obstetra y pediátrica en ese centro asistencial. “Nosotros nos hemos propuesto reducir la mortalidad materna en esta zona y en ese tenor nosotros lo haremos”.
Terrero Encarnación indicó que están ideando preparar centros sanitarios de tercer nivel en la zona, donde hay 29 obstetras, 15 pediatras y 12 anestesiólogos, peor no están resolviendo los problemas.
Aseguró que el próximo martes, a las 9:00 de la mañana, el caso de la joven se discutirá en el hospital San Bartolomé. Sánchez Cueva dejó cuatro hijos huérfanos.
El director regional del Ministerio de Salud Pública señaló que tiene en sus manos el expediente de la joven Sánchez Cuevas y que será sometido a estudios y posteriormente se tomarán decisiones
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